LLOVIÉNDONOS

Me he dejado llover,
mientras te ibas
quedaba todo en el aire,
tu aroma, tu pensamiento
tu fuerza, tus palabras,
quedaban las nubes y el sol
las estelas de tus gigantes pasos.
Mientras marchabas me he dejado llover,
se ha inundado el corazón,
la mente, la memoria,
se ha anegado todo de ti
aunque tu ignoras tu magia,
me he dejado llover en el arco iris
en la bendita sensación de sentirte un día más,
de haberte tenido unos instantes.
No eres consciente
tu no sabes cuánta dulzura existe en ti.
tú no lo sabes,
pero mis exploradoras miradas
atraviesan los mares contenidos
en tus cristalinos ojos,
y te ven desde adentro,
desde las profundas aguas
Me he dejado llover por ti
por tu desconocida ternura,
que hasta el más rudo de tus movimientos
es una caricia, y tu no lo sabes
y llueve dentro mio, y afuera,
llueve esa bendición,
la humedad que preña la tierra
el agua de la vida.
Y tu no lo sabes,
que me llueves, que te lluevo,
que llovemos a la deriva
sin ningún cauce,
llovemos sin que te des cuenta.

Marga Escuder Gea