URGENCIAS

Quisiera ser feliz,
aunque fuera un solo instante,
apartar ese cáliz de tristeza que me embebe,
ese encapricharme de lo imposible,
descansar de mi exigencia.
No tener que controlarlo todo
para que los demás no sufran.
Quisiera ser menos compleja,
dejar que mi mente no piense
y vivir la nota del momento.
Pero no puedo.
Nací pensando,
puedo recordar incluso ese momento.
Y a veces que la luz no alumbra,
sólo te ciega.
Y entonces cierras los ojos a tanta verdad.
Quisiera ser feliz por ese instante
tal vez estuve desaprovechada,
hubiera necesitado carrera.
Un diamante pulido por otras mentes.
Una se cansa de hacerse a sí misma
cuando tiene hambre de conocimiento,
cuando le han robado las oportunidades.
Cuando ha perdido por el camino al amigo,
y la soledad sólo hace que hablar en voz alta.
Necesito un pabellón de urgencias
que me opere de tristeza.
Y una lobotomía para volver a sonreir
sin fingir que estoy contenta.
Necesito que algo me vuelva a salir bien.

Marga Escuder Gea